Un estudio que pretendía sugerir que había una relación entre el navegador que un usuario utilizaba y su coeficiente intelectual, va y resulta que era falso. Vaya sorpresa.
El estudio fue citado en varios medios, desde la CNN hasta la BBC, pasando por
el Facebook de Linux Magazine. Aunque dejamos muy claro que, y cito textual-
mente, “este estudio no debe tomarse en serio. Probablemente sería sencillo coger otros datos que probasen exactamente lo contrario”. Eso sí, nuestro titular no era demasiado ambiguo ni sutil que digamos: “Demostrado: Si utilizas IE eres un zoquete”, más que nada porque esa era una de las conclusiones a las que llegaba el estudio: la media del CI de esos usuarios que habían realizado una prueba de inteligencia online había resultado más baja que la de los usuarios de otros navegadores.
Pero todo era falso, por lo que ¿para qué dedicarle más tinta? Aparte de especular sobre la identidad y la motivación de los creadores del timo (¿un competidor de Microsoft? ¿Un troll aburrido? ¿Un desarrollador web desesperado intentando forzar la extinción de IE 6?), el tema es interesante por las reacciones que suscitó... y esas sí eran reales.
Un inciso: Mira tus manos. Si la base de las uñas de tus pulgares tienden a ser
rectas, eres una persona con un dominio del hemisferio derecho del cerebro, por
tanto eres lógico/a y con dotes para las ciencias exactas. También tenderás a
tener una puntuación superior en las pruebas de CI. Debes perseguir una
carrera en el área de las ciencias o ingenierías. Si la base de las uñas de tus pul-
gares son curvas, domina el hemisferio izquierdo, y eres más apasionado/a que
pensador/a. Lo tuyo es una carrera artística. Si tienes un pulgar con la uña curva
y el otro con la uña recta... bueno es irrelevante, más que nada porque todo lo
anterior me lo he inventado.
Es parte de la condición humana que, si leemos ahora mismo que la inteligencia está asociada a la forma de las uñas, inmediatamente nuestra vista irá a nuestras manos. Es una de esas cosas que nos produce inseguridad como individuos:
que seamos considerados intelectual mente inferiores a nuestros semejantes.
Supongo que es lógico. Como especie que ha basado su éxito en la inteligencia,
debe estar inscrito en nuestros genes que el ser deficiente en esa área lleva consigo un estigma, y esa inseguridad ha dado lugar a toda una serie de pruebas, estudios y, sí, estafas online a cada cual, paradójicamente, más estúpida, que explotan el temor de ser considerado más tonto que el vecino. De hecho, antes de instalarme el Ad Blocker, juraría que los anuncios para tests de CI (en los cuales tenías que dejar el número de móvil para obtener el resultado... y alguna sorpresita más) estaban ahí arriba en lo que se refiere a frecuencia junto con los anuncios para ganar $$$ rápido y los de aumentar el vigor sexual.
Sexo, dinero e inteligencia. Si los estafadores de la web se centran en estas tres
cosas (o, más bien, en el miedo a carecer de ellas) es porque nos preocupan, y no
sólo a nivel personal. Como mencioné más arriba, el ser deficiente en cualquiera de las tres lleva asociado un estigma social, sobre todo en una sociedad como la nuestra, donde seguimos midiendo el éxito en función del de los demás en vez de en función de valores absolutos medidos individuo a individuo.
Ese es el quid de por qué este falso estudio tuvo tanta repercusión: no sólo explotaba un temor a nivel de instinto, sino que extendía sus resultados a grupos de personas, a grupos que además eran susceptibles a encontrarse e identificarse en el estudio. El segregar a los usuarios según el navegador fue, si se me permite, un golpe perversamente maestro en el arte del trolleo por parte de su artífice.
Algunos sujetos se unen a una comunidad, no por aprender nada ni por tener
mucho en común con los otros miembros, sino con la vaga esperanza de
aumentar su propio CI impregnándose de la media al juntarse con gente más
inteligente que ellos. Pero, no hay nada más desconcertante para el homo gregaris que darse cuenta de que, habiendo elegido un grupo, ha escogido el equivocado. En consecuencia, algunos usuarios de IE reaccionaron mal al documento y sus conclusiones, y así lo hicieron saber con indignadas entradas en sus blogs y amenazas de denuncias.
Pero no sólo es risible y, ya que estamos, una prueba de falta de inteligencia
que algunos usuarios se sintieran ofendidos por el estudio, sino también que
algunos autodesignados miembros de la comunidad del software libre aplaudiesen y justificasen los resultados sólo porque percibían que ellos sí se encontraban en el grupo correcto. El problema es que ciencia, lo que es ciencia, no había ninguna para apoyar su posición.
El estudio hizo que la hidra de la tribalización, la competición injustificada por
desjustificada, la división, el odio y la deshumanización volviese a alzar sus
feas cabezas. Señores ¡esto es algo que deberíamos haber superado ya! Por si no
has recibido la circular: El software libre es patrimonio de la humanidad, no de
“la comunidad”. Nadie es mejor que otro por utilizar una tecnología u otra, y una
actitud de superioridad es especialmente hipócrita si se es un usuario de una tecnología diseñada precisamente para unir a todos los humanos indistintamente de su condición.
El chovinismo es repugnante en cualquier área, y en el software libre aún más, ya que los principios del movimiento son totalmente antitéticos a ello.
Y eso, irónicamente, es algo que sí hace que el software libre sea claramente superior a sus alternativas.
nota : Editorial del ultimo numero de la revista Linux Magazine nro 74
